jueves, 13 de mayo de 2010

To fem or not to fem

No quiero ser feminista, ni mucho menos machista. Es jodido encontrar el término medio, sobre todo si el equilibrio se dificulta en varios aspectos de la vida. ¿El hombre debe pagar todo? ¿debemos pagar a medias? si pago a medias, ¿tengo derecho de depilarme menos seguido? ¿el bigotito se va poner alguna vez de moda?
Siguiendo el proverbio "El hombre propone, Dios dispone", ¿dónde carajo está la opinión de la mujer? O sea, si el hombre piensa algún plan y luego depende de Dios decidir si va a ser factible o no... ¿no nos convierte en una marioneta de los dos? Suponiendo que el hombre elige Iron Man II y Dios decide que es muy violenta, y que vayamos a ver Garfield 3D en su lugar... ¿yo no puedo tirar una tercera opción?
O si vamos a jugar al pool o bowling, ¿debo dejarle ganar como hacían nuestras madres y abuelas para no herir su narcisismo? o quizás tengo que usar una regla imaginaria para medir la fragilidad o fortaleza de su narcisismo, sacando de lado cualquier debilidad encubierta de fortaleza.

L.

2 comentarios:

Lima Limón dijo...

Uhm... se paga a medias y no por feminismo sino por orgullo. "No sos imprescindible en mi vida, date cuenta una y otra vez". Éso quiere decir para mí.
A los ateos nos gusta más la versión del proverbio que dice "uno propone y la vida dispone".
Besos, L.!
D.

Lima Limón dijo...

Licenciada, escriba con un color más oscuro! Tenga piedad que no veo un pomo!

D.